miércoles, 11 de julio de 2007

AMOR

Hace mucho que no escribo... y sí. Este mes que pasó fue un poco agitadito. Mucho trabajo, algunas sorpresas gratas por cierto y compromisos y obligaciones. También me pasó que por mucho que pensara en qué escribir, poco era lo que se me ocurría. Participar de otros blogs me resultaba más sencillo, porque me "colgaba" de los temas de los demás. Pero escribir acá... es enfrentarse a la hoja en blanco. Y este mes tenía ganas de escribir sobre cosas que no sé si eran publicables, cosas personales que me encendían la sangre y podían hacer derrapar mis dedos sobre el teclado. Pero bueno, después de mucho cavilar, llegué a la conclusión de que si bien podía llegar a resultar mucho más exitosa y llamativa, esta suerte de Casa de Gran Hermano Bloggera, no iba a aportar gran cosa a los demás, como mucho, hubiera sido una descarga emocional para mí. Es por este motivo, y no otro, que decidí esperar a calmar mis ansias y poder escribir sobre algo un poco más alejado de mis más profundos sentimientos. De todas maneras, uno nunca toma completa distancia de sus inquietudes. Por muy objetiva que sea la exposición, siempre queda al descubierto una porcioncita de nuestra alma. Y como lo que existe y es visible no se puede negar, decidí afrontar un tema, que por ser "vox populi" no deja de ser reciclable. El Amor. Sí, ese, el de las letras mayúsculas. Esta semana me tocó en carne propia y por sujetos externos, volver a repensar esta parte de la vida de todos los seres humanos. ¿Qué es el Amor? ¿Cómo se distingue? ¿Cómo lo expreso? ¿Cuál es la diferencia con el enamoramiento?. Sí, ya sé... es un tema remanido, pero es "EL tema". ¿Acaso no es el sino de la vida de todos los humanos? ¿No es "LA búsqueda" perpetua?
Sí, a mi como a muchas mujeres me criaron para formar una pareja y luego una familia. No soy una Susanita de cabo a rabo, pero... compartimos más de un pensamiento. Así que, con mis añejos (nunca mejor dicho) llegué a algunas conclusiones. El amor y el enamoramiento son cosas distintas, muy distintas... y sin embargo no dejo de constatar que hay cientos de personas que continuan chocándose con la misma piedra. Enamorarse es maravilloso y sencillo, un momento único lleno de deleite y placer. En esta etapa todo es mágico, todo nos hace temblar, todo nos encandila. Es la idealización del amor y la persona amada en su máxima expresión. En este momento, las peleas son muy raras... porque mi pareja "es perfecta". O, en el caso de que se presenten, no duran mucho "porque mi pareja es perfecta y solo importa que estemos bien". Sí, todos lo pasamos... y es un acontecimiento obligado de cualquier noviazgo. Pero, un poquito más tarde llega la realidad. Mi pareja no es perfecta, yo no soy perfecto/a. Ambos tenemos defectos y virtudes, pero lo que es peor, muchas veces las unas chocan contra los unos del otro. Aquí es donde quedan dos caminos por delante: Detenernos en el envión clavando el freno de mano aún a riesgo de rompernos la cabeza contra la banquina o seguir manejando el coche y esperar a retomar el control del vehículo. La segunda opción es la del Amor. Es aceptar la imperfección del otro y reconocer que es preferible vivir una vida entera con esas imperfecciones a pasar un segundo sin ellas. Como dijeron en una peli que vi anoche: "Prefiero pelearme contigo toda una vida, que siempre hacer el amor con otras". Bueno, sí, aunque no lo crean era el personaje masculino el que lo decía.... ¡¡¡Por eso se llaman "películas"!!! Pero esta es un poco la realidad. El Amor perfecto no existe. Bah, no existe según los parametros que maneje cada uno de "perfección", no? Para mí el amor perfecto es el que se basa en el respeto, la sinceridad y el cariño. Sí, claro, el sexo es importante... incluso puede ser fundamental, pero por un momento aíslemos el concepto de amor y sexo. Porque sexo bueno puedo tener con muchas personas, incluyendo personas que no me sean gratas pero tengan una gran destreza. Sin embargo el Amor, es mucho más complejo de encontrar y dar. Volviendo al amor, yo creo que casi cualquier situación desagradable que pueda presentarse en una pareja es facilmente rebatida por estos tres pilares. Pongamos el ejemplo de que me sean infiel. Si esa persona me quiere, no me heriría, si me respetara, no me engañaría, si me fuera sincero, no sería capaz de mentirme. Pensemos en otro ejemplo: Una discusión por cualquier tema que sube de tono y se llega a la violencia verbal. Si me respetara no me insultaría, si me tuviera cariño no me agrediría, si fuera sincero... aceptaría que de cualquier situación uno siempre es en parte responsable. En una pareja las culpas siempre son compartidas. Así podríamos poner mil ejemplos.
Muchísimo más sencillo es cuando uno posee la capacidad de ponerse en la piel del otro. Lamentablemente con esta nueva moda del individualismo, esto sucede cada vez más esporádicamente. Estamos creando parejas basadas en el "yo tengo que pensar por mí, porque sino ¿quien va a pensar?" y no es así. Si promulgáramos el "hay que pensar en el otro" todo surgiría mucho más naturalmente y sería más bello. ¿Porqué? Porque al pensar el uno en el otro esto se volvería recíproco, por ende sería la persona que amo la que me cuida y no yo... lo que concluye en un acto de amor y confianza. Es el dejarse caer en el corazón de quien amo, porque será el quien me proteja del dolor y la caída.
Veo gente que se sorprende de que alguien que lo ama, elija acompañarlo. Sí, cuando tiene que hacer cosas que no son del todo las que quisiéramos hacer como ir a un velatorio, trabajar todo un fin de semana o pasarselo poniéndote pañitos fríos en la frente porque estás enfermo. Y miran sospechosamente el cuidado y cariño que se pone en esta tarea. ¿Que clase de amor tuvieron estas personas? ¿Que concepto tienen del amor que esto les resulta tan extraño? ¿Cómo amarán partiendo de este desconocimiento? ¿Que pensarán que quiere decir uno cuando habla de "compartir una vida"?
Es justo esto: apoyar, acompañar, bancar, pelear, luchar, conquistar... todo desde el amor. El amor de quien sabe que no sos perfecto y te ama así. Es amar en las buenas y en las malas. Es jugarse al compromiso total con el otro. Las medias tintas no sirven, no son amor. Amar cuando todo es lindo y me dan todo lo que quiero, no es amar. Es ser cómodo, conformista. También ví en este tiempo ese amor ultimamente. El que se basa en que todo esté bien... y cuando no todo está bien parece querer bajar los brazos. O cuando hay que asumir un compromiso personal, comienza a desdibujarse. ¿Es el síndrome del niño rey? ¿El del que está acostumbrado a recibir todo sin que le sea pedido nada a cambio? ¿El que elige que es lo que da porque no le cuesta nada? No, para mí el amor es más grande cuanto más sacrifica. Ojo, no entremos en valoraciones peseudo masoquistas porque no es el caso, me sigo refiriendo a situaciones normales. Es decir, hablo de un amor sano que sabe brindarse aún a costa de ceder en nuestro orgullo e individualidad. Hablo de compromisos con el otro. Por lo general estos amores "convenientes" son menospreciantes. El que todo lo recibe sin ser exigido y sin comprometerse, no suele valorar los sacrificios del otro. Sencillamente porque está acostumbrado a eso. A recibir sin mirar ni preguntar cuanto costó. Y las mujeres somos muy de padecer estos amores, porque nos enseñan que la pareja está antes que nada, que por la familia hay que darlo todo... y lo hacemos sin dudar. Tiempo después nos encontramos que todo aquello que hicimos fue visto por nuestra pareja como algo "normal". Cuando no, como que era "nuestra obligación". Estoy segura de que a muchos hombres les ha pasado alguna vez también, pero reconozcámoslo, no es la generalidad.
Y ahí estamos nosotras subiéndolos a pedestales, amándolos con locura y sintiendo que todo lo que hacemos no les alcanza. Puede parecer una mirada un tanto feminista, y no pretende serlo. Sé que existen semi diosas que reciben todo esto y tampoco lo aprecian... pero apunto a encontrar un punto intermedio. Un punto donde hombres y mujeres se sienten "uno al lado del otro" y lo miren con el corazón. Un momento dónde puedas ver que ella es la reina de tu corazón, que te ama, te respeta, te da su honestidad toda y por eso se merece ser justamente eso: TU REINA, valorada y atendida como tal. Un instante en que él se te rebela de nuevo como tu PRÍNCIPE AZUL y redescubras todo lo que te ha dado con el tiempo y lo muchísimo que vale. Si todos los días nos sentáramos un segundo a pensar y sentir con el corazón, amaneceríamos cada día enamorados... y Amando. Yo lo hago cada día, elijo todos los días a mi amor y perdura porque se lo merece y lo vale. ¿Vos también lo hacés?.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuanto hay para escribir de este tema, no?
Podemos elucubrar diferentes sentencias y es posible que todas parezcan tener razón. Pero a lo que nos enfrenta la realidad es a que la mayoría de las veces las cosas no funcionan. Qué es lo que sucede? No será que simplificamos algo que es complejo? O es que hacemos complejo lo simple?
Encuentro que todo tipo de relaciones (amorosas, amistosas, laborales) pasan por esa etapa de “enamoramiento” aunque la diferencia podemos encontrarlas en que, los inicios de las mismas están construidos sobre distintas bases. Mientras que laboralmente tomamos recaudos, somos recelosos, desconfiamos, pensamos en qué querrá de nosotros esa persona que se acerca con tono amable, en las amistosas y amorosas nos dejamos llevar por la ola de si nos resultó agradable la persona con la que interactuamos, si nos hizo pasar una noche divertida o si nos gustó físicamente.
Entonces para ir yendo al tópico que nos ocupa, sucede que cuando comenzamos a enamorarnos dejamos de lado cualquier tipo de filtro, porque la venda no se nos corre nada de nada. Y si alguien osa siquiera “ayudarnos a ver” tendrá nuestra condena eterna. O no tan eterna, hasta que la venda se caiga de vieja y pesada.
Sé que no es original, no lo inventé y es viejo, pero el “No Vio” cabe perfectamente para explicar lo anterior.
Pero que es lo que no vimos? Que el amor se iba a ir deteriorando, desgastando, cansando hasta el hartazgo? Que se iba a convertir en otro tipo de amor? No lo creo. Me inclino a pensar que lo que no vimos de ese amor, es que NO EXISTÍA o al menos, no como creíamos.
Es que hay distintos tipos de amor? Seguramente y no tiene sentido enumerarlos aquí, pero el de pareja que es el único que nos puede llevar a fundirnos en el sexo y convertir a dos en “una sola carne”, es único. Tiene puntos de comparación pero no se equipara por los logros obtenidos de la fusión. Fusión que no es comparable a ninguna otra muestra de amor.
Claro que los otros amores no pueden tener ciertas cosas de este amor, pero este debe tener todos los condimentos de los otros amores. Para no caer en errores de interpretación, puede haber amor maternal o paternal en una pareja, sin que pretendamos convertirnos en padre o madre de nuestro acompañante.
Recuerdo que cuando me casé, me leyeron unos versos de la Carta a los Corintios del Apóstol Pablo en la cual decía:
“El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece;
no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;
no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.
Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
El amor nunca deja de ser”

Esto lo escribió alguien que luego propondría no unirse en matrimonio si eso fuera causa de alejamiento del cristianismo, ocasionando interpretaciones que llevaron a alejamientos peores, pero eso es harina de otro costal.
De la cita me llamaba la atención que en esta traducción mencionara las palabras sufrido y sufrir, entonces busqué en una traducción que dicen, es la más fidedigna (la de Jerusalén), donde traduce sufrido por paciente y el “todo lo sufre” por “todo lo excusa”. Pretender saber que pasaba por la mente del escritor al utilizar tales palabras es difícil hoy, pero a veces para entender hay que leer el contexto y en ocasiones la “hoja de vida” de las personas. Hoy puedo decir que me convencen más los términos que no hablan de sufrimiento porque un amor no debería sufrirse, sino disfrutarse. Pero díganme si soy lelo o acomodaticio pero imagino que mientras le ponemos los pañitos fríos en la frente al enfermo, podemos sufrir por la malograda salida al parque a tomar mate que no se dio, pero algo mayor hace que resignemos.
No me imagino en la idea de soportar la inclusión de por ejemplo: cuernos. Hay demasiados indicios para entender que no se refería a eso ni a desplantes menores, porque “no hace nada indebido” acaba con todas las suspicacias.
No busca lo suyo y todo lo espera, parece de una resignación total, pero esto creo que es desarticulado con lo que decía al principio, fundirnos, ser uno. Porque lo que me suceda, nos sucederá a ambos.
Para graficarlo quiero mencionar algo que vi en otro país donde se dice que “el cliente es dios”. Esto puede acercarse a nuestro “el cliente siempre tiene la razón”, pero hay que ver como lo llevan adelante estos tipos. Uno de los primeros días de mi experiencia japonesa, pasaba frente a una Estación de Servicio justo en el momento en que el cliente se iba. Allá se acostumbra a que el que atendió a ese cliente le pregunte para que lado sigue viaje y se coloque en la calle para indicarle cuando puede salir y cuando no, por motivos del tránsito. Lo que más me sorprendió es que se lo despide con lo que sería un “muchísimas gracias. Lo esperamos nuevamente” seguido de una inclinación de torso que para mí era interminable, tras lo cual volvía a la playa de despacho. Me tocó luego en infinitas ocasiones hacer de acompañante de esos clientes así que pude ver como lo toman ellos. Nadie se cree nada. El respeto es total. Es decir, el cliente sabe que está siendo considerado un “dios” pero no se cree un dios y no lo hace valer como tal. Esto se extiende a cualquier otro ambiente en donde hay intercambio entre comerciante-cliente.
Dejando de lado costumbres foráneas y temas que seguramente tienen más que ver con lo comercial, el reclamo de nuestra Cereza, pasa por un ida y vuelta que no se da y si no se da no hay relación posible a menos que alguien acepte dejarse someter.
No es fácil hacer sentir como una a reina a alguien que nunca te hace sentir como un rey y viceversa. Si en la relación se intercala además la competencia, tenemos entonces el cóctel explosivo.
Lamentablemente como humanos no prestamos atención a los cambios que poco a poco se van dando en nuestra actitud hacia nuestro acompañante, porque creemos que ya está, que ya lo tenemos y que todo funcionará de ahora en más, con “piloto automático” pero este no existe en las relaciones. Tristemente nos damos cuenta de esto cuando ya chocamos y en algunos casos, ni el choque nos despierta por lo que estaremos idiotamente preparados para el siguiente.
Iba a terminar acá pero el tema merece que no cierre esto con un párrafo negativo. Cual Palega Ortito, “yo tengo fe”. Soy optimista. Sólo tendré que ver que quien enamoro no lleva vendas, ni yo llevarlas.
Karuros (un choque fuerte pero de costado. Todavía en marcha)
PD.: Perdón por lo largo, pero no puedo con mi Naturaleza...

Anónimo dijo...

Yo era la Reina de un hombre,de su vida,vivía en la cima de su corazón,desde ahí yo veía crecer nuestros frutos:nuestros hijos.
Nuestra familia era un jardín, la familia reía.Teníamos todo,amor a granel y así pasábamos los días,juntos al fin.
¿Porque murió nuestro amor?
Si yo era la Reina de su vida, y él era el Rey de mi vida.
Mi Rey me amó como pudo, me cuido como pudo, lo hizo desde su nobleza,como lo sigue haciendo hoy,ahora cuida a la mamá de sus hijos.
Yo seguía pidiendo más.
Yo era su Reina, así lo juré ante Dios, yo era su amor, su respiración, sus ojos, su vida.
¿Cuándo llegó la “Destrucción” en nombre del amor?
No sé la respuesta o si la sé, solo que me siento completamente responsable.
¿Si las culpas son compartidas?
A veces no.Por eso las pago,por eso las tengo.
De verdad creo que hay casos en que solo hay un culpable.
Y en este caso soy yo.Si existiera una sentencia, que no les quepa duda, que este amor se terminó por un solo culpable.
Cherry, me pones en un aprieto, cuando me invitas a ponerme en la piel del otro.Si yo lo hubiera hecho, hoy estábamos juntos.
El “egoísmo”,destruyó nuestro mundo.“MI INDIVIDUALISMO”.
Y pensé en mí, porque sino ¿quién va a pensar?
Entonces nuestro amor fue muerto sin piedad, y mi flia. la partí en dos.
Y todo en nombre del "amor".

¿Para que?
Para luego ser la Reina de otro corazón, de otra vida.
Yo soy la Reina de otro amor, estoy ahora nuevamente en la cima de la vida, con miedo, con incertidumbres, sin certezas, solo con miedo, esta vez no me permito fallar.
Solo escribís del síndrome del niño Rey, del que está acostumbrado a recibir todo sin que le sea pedido nada a cambio, o peor aún “del Sr. ombligo del mundo”que lo ve como “normal”, y cuasi “obligación” que lo adoren a mas no poder, ya que tuviste la “suerte de ser LA ELEGIDA”por él.Bueh!!...no es tan así,seamos un poco justas, algún hueso te tiró, alguna caricia te hizo, esas que nos conforman a las mujeres y una queda moviendo la cola esperando nuevamente otra más, que lógico “nada le cuesta”,es su devolución por tanto recibir, una caricia que no lo compromete con hechos.
Hablar y si claro que habla, promete como ninguno!!
Ahora por “tu sacrificio, adoración y devoción” la paga es una caricia y palabras de amor.

( ) Y aquí estamos las mujeres padeciendo estos amores...amándolos con locura y sintiendo que nada de lo que hacemos les alcanza.

Ok, hago Mea culpa.
Aquí estoy yo: Semidiosa?
Que todo lo recibo, que nada me cuesta,nada me conforma y tampoco lo aprecio, porque a la primera de cambio, agarro el bolsito y me voy a conquistar reinados, porque todo me es fácil, porque enamoro en un chasquido de dedos, porque me convierten “en el amor de su vida”.

No. Terminantemente no.

A mi todo siempre me costo el doble, porque primero tuve que demostrar que soy mas que el estuche, porque tal cual lo expresa Don Karus, antes que “yo”,como ser humano tuve que mostrar mi hoja de ruta de vida. Eso es humillante, pero es verdad primero la hoja de ruta luego el desafío de “enamorar para toda la vida, cuando estuve con Pablo, lo que él recuerda siempre es que le dije: “Yo soy para siempre”.
Saben quien hablo ahí?.El miedo.
Él me canto la canción “Presente”,
Saben la letra?
Ese día,no lo voy a olvidar nunca y por si acaso lo olvido,lo tengo escrito segundo por segundo,él si olvidó parte de ese día.
Así es la mujer, así es el hombre.
Don Karus dice: que en las relaciones personales si la persona nos resultó agradable si nos hizo pasar una noche divertida o si nos gustó físicamente,ahí empezamos a enamorarnos,idealizando
dejamos de lado cualquier filtro.
Sigo yo: construimos un bunker, que nadie se atreva a tocarnos, a mirarnos, porque somos el “amor perfecto”!
Que hacemos cuando se nos cae la venda por pesada,cuando dejamos de mentirnos,cuando dejamos de apostar en el otro, y bueno otra vez el Sr. Egoísmo: "solo pienso en mí".
Mas en esta “second chance”, no se permiten errores, no se permiten equivocaciones, vacilaciones, aquí solo se busca la libertad y complitud,religión y filosofía, el circulo perfecto, así como lo define mi novio.

Nuestra vida felíz, está hecha para encontrar el “amor perfecto de pareja”, el que te inspira, el que te da fuerzas, el que te sostiene, el que deja de lado por un momento el egoísmo y empieza a cuidarte como se debe, no con palabras y promesas que las mujeres sabemos que no la van a cumplir. Las intenciones aunque buenas, tampoco tienen cabida. Solo hechos.

A mí también me leyeron la misma cita, cuando me casé.
El amor todo “lo excusa”.
Ese ida y vuelta, que nunca se dá, y si se da no es parejo, y uno la pelea, porque no quiere que el amor se muera. No se soporta otro fracaso más.

A mi me hicieron sentir Reina, y yo hice sentir Reyes , a mis dos compañeros de vida, y sin embargo , una relación se terminó.
La otra está naciendo, estamos en la etapa del enamoramiento, donde todo es perfecto .
Yo conocí a mi Pablo de una manera, ahora es distinto, ahora creció, ahora es mas grande, está carreteando a punto de despegar a un vuelo perfecto al cielo abierto,está en su mejor momento y yo lo vi crecer como ser humano, como profesional y no hay competencia entre nosotros, por ahora, no existe ese cóctel explosivo y tan peligroso, que Ud. tan acertadamente tiró Don Karus, el detonante del final de mi relación anterior, fue en gran parte por “el protagonismo, el individualismo, la competencia”, eso arraso con el amor de pareja.
Se puso piloto automático y todo se vino abajo.
NO voy a volver a cometer nunca más ese error, nunca más el piloto automático.
Pero sé también que esta “second chance”, es más egoísta aún que la primera.

Stella Rojas
En su “second chance”,sin vendas, y apostando todas sus fichas, a este "amor perfecto" de mas de un año.

→FAIRY ♥ KAMI← ® dijo...

Uhmmmm... que dificil es escribir cuando existen escritores así, che!
Don karus... su texto interesantísimo. Como siempre, coincidimos en muchas cosas. La tiene ud. muy clara... es un orgullo gozar de su sabiduría mi amigo. Tiene que deleitarnos con su escritura más a menudo!!! Por favor!!!!
India... me parece que se está haciendo cargo de un problema cultural, como algo personal. Yo creo que nuestra sociedad no forma personas que sepan estar en pareja o construir una pareja para todo la vida. Lo que usted dice de ser semidiosa o individualista... no es suyo. No es su culpa. Yo creo que usted manejó los códigos que todos manejamos en algún momento e hizo lo que todos hicimos en algún momento. El tema es crecer. Léase a sí misma, más tranquila y fíjese en la india que describe su primer matrimonio y la india que cuenta lo que espera de ésta, su second chance. Léase de nuevo, porque se va a sorprender de cuanto creció. Hay un cambio radical en su discurso... no sé, quizás me parece a mi... De todas maneras, apunto a la reciprocidad, y sí, sigo creyendo que las culpas son compartidas. Algo te pasó a vos para dejar de hacer tu rey a tu primer pareja. Hay un algo de negligencia de su parte, de omisión. Uno solo no permanece enamorado "porque sí", el otro tiene que poner lo suyo. Bueno, es un tema muy largo... tal vez, de para más adelante reciclarlo e hilar más fino sobre algunas cuestiones... si se les ocurre algo avisen!!!
Besitos a los dos!!!

So dijo...

Uy Cherry!!! como hago para opinar después de semejante comentario tuyo? y luego pa´colmo el de Karus y la Indu????.

En fin, trataré de dar mi opinión al respecto, aunque creo como dijiste en algún párrafo, esto da para más y para hilar más fino en otro momento.

El amor!! L´amour! Oh la la! diríamos con acento francés.

En principio, así rápidamente y sin querer analizar demasiado mis pensamientos instantáneos, creo que hay diferentes tipos de amor. Y si. Yo lo siento así, no sé si hay muchos pero por lo pronto conozco 2 muy distintos y es el amor por un hijo y el amor hacia tu pareja.

Yo los considero distintos. Por qué?. Hoy me encuentro pensando esto porque tengo la seguridad de que por mi hija tengo un amor incondicional a prueba de enojos actuales y futuros, a prueba de desplantes actuales y futuros, a prueba de heridas (por ahora solo futuras), a prueba de muchas cosas que estoy segura en el amor de pareja conllevan a discusiones y marcas difíciles de olvidar.
Quizás me equivoque al pensar así pero cotidianamente lo vivo y lo veo en otras madres, en la mía, en las de amigos, en mi suegra.
Veo que a pesar que tengan hijos que les han hecho daño, que les han dado muchísimas lágrimas en todos estos años, igual mantienen un amor que de a poco voy empezando a entender. Ese amor incondicional que me surge después de enojarme con mi hija y al instante de ver su llanto me quiebro en un abrazo interminable. Y si, la amo más que a nada en este mundo. Muy arriba y no me da miedo ese amor, no me avergüenzo de ese amor y sobre todo es un amor en el que no tengo vendas. Sé lo que está mal y sé que no es amistad porque soy su mamá y sobre todo soy responsable por su educación y demás situaciones que no vienen al caso citar pero todos las conocemos.

Amor.. puff, escribiendo de amor me acuerdo de mis padres y me acuerdo del AMOR (así con mayúsculas) que le tenía mi viejo a mi mamá. Amor que se notaba en cada gesto, en cada enojo, en cada celo que tenía cuando ella salía (si, después de 40 años de casados él se ponía celoso si ella hablaba con un tipo!!!).
Y como prueba, basta un botón (dicen por ahí..) aquí les dejo una poesía que escribió cuando ya llevaban más de 40 años de casados. (obviamente siempre supusimos que era para mi mamá no? je).

AMOR Y PASIÓN

DIJISTE QUE ME QUERIAS
COMO A NADIE HABIAS QUERIDO
Y YO TANTO TE AMABA
QUE A TUS PIES CAÍ RENDIDO
AL ESCUCHAR TUS PALABRAS
SE ESTREMECIO MI CORAZÓN
ES ESA INMENSA ALEGRÍA
QUE TE BRINDA LA PASIÓN
MI PASIÓN DESENFRENADA
POR SER DUEÑO DE TU AMOR
ME ELEVA HACIA LA CUMBRE
DE MI FRENESÍ INTERIOR
YO QUISIERA SER UN MAGO
Y REGALARTE UN CIELO
PERO SOY SOLO UN AMANTE
QUE TE AMA CON DESVELO

Bueno, mi querida Cherry... y si.. a quien no le gustaría tener un hombre que te escriba esto no?.

Besos

W39

→FAIRY ♥ KAMI← ® dijo...

Sobre el amor madre/hijo. Ninguna objeción. Nadie podría haberlo explicado tan bellamente... mmmm... bueh, no se ofenda, pero Karuros y la India seguro también se lucían.
Pero sí, el Amor del que hablaba sobretodo por lo difícil (y porque como decìs mi querida woman el amor de los padres es incondicional) es el de la pareja.
Que puedo decir sobre tu padre? Que lo admiro, no todos los hombres tienen la delicadeza de saber hacer que su pareja sepa cuanto y como la ama.
Que puedo decir de tu madre? Que por lo que contás supo corresponderlo y que ES UNA SUERTUDA!!!!!!
jajajajaja
Besitos amiguis!!!!

So dijo...

La verdad que sí, mi mamá fue una mujer muy afortunada por vivir tantos años al lado de ese hombre que la amó hasta sus últimos días. Supongo que por eso se le hace tan difícil retomar la vida ella sola (sola en lo que a pareja, a SU pareja respecta).

Ayer cuando te escribí tenía mil cosas más para decir pero se haría muuuuuy extenso todo junto.

Volviendo a leer tu post analizaba tus preguntas. Qué es el amor? Como se distingue? Como lo expreso? Que diferencia tiene con el enamoramiento?.

Entonces intentaré responder la primera.. a modo de reflección y de ninguna manera como erudita sobre la materia.

Qué es el Amor?:Pues creo que tiene muchos significados, por lo que es difícil meterle una definción al mejor estilo "Real Academia Española". Tiene muchos significados porque, como todo sentimiento, depende justamente del sentimiento/requisito que cada uno le agregue a la definición.
Es como tratar de definir Amistad, aunque por alguna razón la gente cree que es más fácil definirla que al Amor.
Después tenemos las definiciones que siempre aparecen en los posters, tarjetas, poemas, que fácilmente y muchas veces hablaron y hablarán por nosotros o por los demás.
Cuando era adolescente había un lugar sobre la Av.Corrientes que se llamaba Posters del Tiempo, ahí tenías miles y miles de posters y tarjetas que se encargaban de "definirte" el amor, la amistad (entre las definiciones preferidas). Obviamente, como toda adolescente, me enganchaba en esas definiciones y me enamoraba de esas fotos románticas de amor eterno.
Reconozco que hoy los chicos y los adolescentes son distintos, quizás se reirían de esas cosas... no lo sé. Pero los de nuestra generación muchas veces nos preguntamos: ¿Un final feliz es realmente feliz?.¿Será que hay que empezar de nuevo? De nuevo nuevo, quiero decir. Empezar con otra idea. Quizá con la certeza de no tener ninguna idea e ir viendo. Paciencia. Como quien tiene que ordenar un placard donde guardó de todo, y hecho un bollo. Hay que rehacer el amor. Pero entonces habría que pensar primero qué es hacerlo. O rehacerlo.

Un poco de eso ya habíamos hablado hace un tiempo en otro lugar, y algo de eso estoy por escribir (más adelante cuando pasen las vacaciones de invierno en mi blog).

Besos

→FAIRY ♥ KAMI← ® dijo...

Hola mi queridísima Letu's!!! A ver si entendí... vos decís de hacer algo tipo: "Solo sé que no sé nada" pero aplicado al amor. O mejor dicho a la forma de amar. Cuestionar todo aquello que hemos aprendido, tirar abajo los pilares del conocimiento, para "desde la nada" poder recrearlo. (¿?)
La idea es buena, es un poco más compleja que mi idea de "volver a mirar y descubrir", es más ambiciosa, ¡pero me gusta!
¿Alguna receta o idea de como empezar? JE! Mirá que fácil te la dejé!
Un beso GRRRRRRANDE y Feliz Día del Amigo!

So dijo...

Mi querida amiga!. Nada es fácil! jajaja. Fácil es sentarse a filosofar y no poner acción en el momento que hay que hacerlo.

La verdad es que sé que re-hacer el amor es una tarea ambiciosa pero no es imposible.

Besotes!!